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Planilla Firmas Apoyo Paisaje Protegido

31 de octubre de 2010

¿Por qué debemos preocuparnos por los humedales?

Los humedales se encuentran entre los ecosistemas más productivos del planeta, ayudan a mitigar inundaciones, retienen sedimentos, sustancias tóxicas y nutrientes, poseen una alta biodiversidad, controlan la erosión, almacenan carbono, proveen servicios de transporte y de recreación y son una fuente importante de alimento. Es por ello que los humedales han jugado un papel primordial en el desarrollo y sostén de las sociedades en todas partes del mundo desde tiempos inmemoriales. Una de las cuencas hidrográficas más grandes del planeta, la cuenca del río Amazonas, de más de 7 millones de kilómetros cuadrados, es uno de los reservorios de agua dulce más importantes del continente Suramericano y constituye una fuente elemental de pesca y transporte para la población local.


En la actualidad, el uso de los humedalesse ha diversificado y ahora proveen otros servicios y fuentes alternativas de ingresos a la población local tales como la pesca recreacional, el turismo, la caza y la observación de aves. Estas actividades alternativas pueden convertirse a su vez en oportunidades para el desarrollo sostenible.

Dependiendo del tipo y ubicación del humedal, muchos de los servicios que éstos suministran a la población pueden ser menos tangibles. Ejemplos de ello son el mejoramiento de la calidad de agua, la mitigación y control de inundaciones y la provisión de canales navegables. Para numerosas poblaciones los humedales constituyen santuarios naturales ya sea como un paisaje que tiene una importancia histórica o cultural, o como una reserva de biodiversidad.

Los humedales son importantes para la gente debido a una gran variedad de razones desde el sostenimiento de la vida y la provisión de agua hasta la herencia cultural. El suministro continuo de estos servicios depende de la integridad y la salud del humedal y sus recursos.
 
¿Qué tan amenazados se encuentran los ecosistemas de humedal?

La Base de Datos sobre los Sitios Ramsar1 y la Evaluación de los Ecosistemas del Milenio (MEA 2005) dan una idea de las principales amenazas sobre los humedales. Las amenazas más comunes son:

Crecimiento poblacional y urbanización


• Drenaje para la agricultura
• Desarrollo de infraestructuras
• Deforestación de cuencas hidrográficas
• Construcción de represas y canales fluviales
• Extracción de turba
• Contaminación
• Pesca ilegal y acuicultura intensiva
• Sobrepastoreo
• Introducción de especies invasoras

Adicionalmente, existen amenazas de carácter global sobre los humedales las cuales incluyen el cambio climático y sus impactos (como la ocurrencia más frecuente de sequías, tormentas, inundaciones, etc.), la globalización del comercio pesquero, la privatización de servicios de agua y la falta de voluntad política de los gobiernos nacionales en materia de conservación de los recursos naturales (Cappato y Peteán, 2005).

La pérdida a nivel mundial de humedales se ha estimado en un 50 % de la superficie original en los últimos 100 años (MEA, 2005). Esto ocurrió principalmente en las regiones templadas del Hemisferio Norte durante la primera mitad del siglo XIX. No obstante, alrededor de 1950, humedales tropicales y subtropicales han ido desapareciendo rápidamente, en particular los bosques de pantano y los manglares.

La degradación de un humedal puede que no cause su desaparición total, pero consigue dañar severa e irreversiblemente su funcionamiento y capacidad de proporcionar servicios a la población.

Stolk, M. E., P. A. Verweij, M. Stuip, C. J. Baker and W. Oosterberg (2006). Valoración Socioeconómica de los Humedales en América Latina y el Caribe. Wetlands International. Los Países Bajos.

22 de octubre de 2010

sin HUMEDALES no hay Agua..... sin Agua no hay VIDA

21 de octubre de 2010

OPINIONES DE ESPECIALISTAS

A continuación, los párrafos más destacados del estudio:


Urbanizaciones cerradas en áreas inundables del municipio de Tigre: ¿producción de espacio urbano de alta calidad ambiental?

Diego Ríos, Becario doctoral CONICET- Universidad de Buenos Aires.


y Pedro Pírez Investigador CONICET- Universidad Nacional de San Martín- Universidad de Buenos Aires.

Este trabajo se basa en avances de una investigación que desarrolla Diego Ríos, con una beca doctoral del Consejo Nacional de Investigaciones Científicas y Técnicas -CONICET, en el marco de los siguientes proyectos de investigación de la Universidad de Buenos Aires: "Riesgo, vulnerabilidad social y catástrofes. Estudios de caso", dirigido por la Dra. Claudia Natenzon; "La configuración urbana de la Región Metropolitana de Buenos Aires en los años '90", dirigido por el Dr. Pedro Pírez.

Resumen

Desde la última década del siglo XX, los actores económicos privados comenzaron a producir urbanizaciones cerradas sobre áreas inundables de la periferia del Aglomerado Gran Buenos Aires, a partir de la incorporación de trabajo, grandes capitales y tecnologías especializadas. Este proceso de producción privada de espacio urbano, en el que convergen intereses tanto públicos como privados, ha sido legitimado a través de discursos referidos a las nociones de "desarrollo sustentable" y "recuperación ambiental", viabilizando el avance de grandes "negocios urbanos" que, contradictoriamente a lo que se sostiene, tienden a una alteración de las funciones ambientales sin precedentes. En este trabajo se abordan las contradicciones que surgen de los procesos asociados a la producción de espacio urbano de "alta calidad ambiental" en términos de la confrontación entre los discursos y las prácticas de los actores sociales intervinientes, a partir del caso paradigmático de las urbanizaciones cerradas del municipio de Tigre.

Introducción

Las tierras altas de la periferia del AGBA, muchas de ellas de gran potencialidad agrícola, fueron las más valorizadas por los actores económicos privados para la producción de urbanizaciones cerradas (UC). Sin embargo, una considerable cantidad de tierras correspondientes a áreas de máxima inundación, también empezaron a tornarse atractivas para el desarrollo de estos emprendimientos a partir de los años noventa.

Ahora bien, ¿cómo fueron superadas en el caso de las UC las limitaciones físico-naturales y jurídicas que impedían transformar las tierras inundables en tierras urbanizables, dando lugar a un formidable negocio urbano? Con la incorporación de trabajo, grandes capitales y tecnologías especializadas (movimiento de suelos y refulado hidráulico) se edificaron enormes rellenos, que implicaron el traslado de millones de metros cúbicos de suelos, permitiendo alcanzar la "cota de seguridad" requerida por las normas. De esta manera, dichos rellenos fueron el sistema constructivo utilizado para incorporar esas condiciones físico-naturales adversas al proceso de producción del espacio urbano y, al mismo tiempo, cumplir con la reglamentación vigente.

La elaboración de un andamiaje discursivo asociado a las nociones de "desarrollo urbano sustentable", "recuperación ambiental" y "valorización del paisaje" acompañó ese proceso, y en un contexto de creciente "sensibilidad ecológica", se orientó a legitimar y viabilizar el avance de esos negocios urbanos

Al mismo tiempo, la producción de ese suelo urbano en el municipio de Tigre fue posible gracias a la contribución de su gobierno local, que aportó con cambios legales y producción de obras físicas. Resultaría de esta manera una coalición, o una convergencia de intereses, entre el gobierno municipal de Tigre y los grupos inmobiliarios en la promoción de la producción de suelo urbano en zonas inundables con base en el relleno. Es por ello que consideramos, e intentaremos mostrar, que discurso ambiental y cooperación público-privada son dos elementos que conforman el proceso que estudiamos.

Esa producción de UC sobre rellenos realizadas con base en una planificación privada del espacio, sin precedentes en la historia del AGBA, contradictoriamente a lo que se argumenta, generó importantes cambios en materia ambiental, alterando las funciones que brinda el ecosistema del humedal y potenciando/produciendo, al mismo tiempo, situaciones de riesgo de desastres por inundaciones.

A continuación, se caracteriza y analiza la articulación entre actores públicos y privados que posibilitó la expansión de las UC construidas sobre rellenos en áreas inundables del municipio de Tigre y sus consecuencias ambientales. Se toma como caso paradigmático la planificada mega-UC Nordelta.

Producción de espacio y cuestión ecológica.
El caso de las urbanizaciones cerradas de la periferia del AGBA

Los actores económicos privados que producen espacio urbano en la periferia del AGBA ofrecen un nuevo producto de "alta calidad ambiental" para los sectores medios y medio-altos: las UC. Esta oferta se realiza a través de una mediación publicitaria y de estudios de marketing que, con un reiterativo discurso ecológico, promueven la necesidad de "vivir en contacto con la naturaleza", como práctica para una "mejor calidad de vida". En esa publicidad, al tiempo que se exaltan los servicios de alta calidad, como los sistemas de seguridad, se omiten ciertos elementos no atractivos para los sectores a los que se dirige el producto, como puede ser el paisaje deteriorado y la inseguridad asociada con los vecinos asentamientos precarios y "villas miseria". De allí la idea de vivir en el "campo", en contacto con la "naturaleza" y las prácticas .positivas asociadas, en tanto "ocultamiento" de los aspectos negativos propios a los lugares donde se implantan.

Se instala, cada vez con mayor potencia, la necesidad de consumo de "espacios verdes". Se despliega una carrera por una tierra promovida especulativamente, desde una suerte de "ideología de la clorofila", gestada por actores económicos privados vinculados a los negocios urbanos, entre los que adquieren un papel fundamental las empresas de publicidad y de marketing.

La magnitud de los impactos en el sector inundable del municipio de Tigre sirvió como disparador para que los actores económicos privados elaborasen discursos orientados a justificar ambientalmente (a partir de las ideas de "saneamiento ambiental", de "valorización del paisaje", etc.) las significativas transformaciones que iban a resultarse de la construcción de las UC edificadas sobre rellenos. Para estos actores los humedales de Tigre eran considerados como "pantanos improductivos", que debían convertirse, a través de la incorporación de capitales y tecnologías especializadas, en espacios urbanos de "alta calidad ambiental" que distinguirían al "nuevo Tigre". Estos argumentos han quedado expresados en sus propias declaraciones (Fernández, 2002): "Acá había grandes espacios de tierra libre, donde no se podía vivir. Eran tierras bajas, y a través de un trabajo de ingeniería se pudo reciclar [...]. Se convierte un pantano, a través de relleno y refulado, en un lugar con lagos". A lo que agrega: "El proyecto ofrece una ciudad con mejores condiciones sociales y urbanísticas, comenzando por la recuperación de un área baja y ecológicamente deteriorada, por medio de obras de saneamiento hidráulico y valorización del paisaje, sin las cuales el terreno seguirá siendo un enorme baldío inaprovechable y peligroso", (p. 57).

Del total de la superficie transformada por las UC edificadas sobre rellenos en tierras inundables del sector continental de Tigre (alrededor de 3.300 ha. para el año 2001), más del 70 por ciento corresponde ados mega-UC24: Nordelta y Villa Nueva. Ambos emprendimientos se presentan como proyectos urbanísticos planificados y en el caso de Nordelta como nueva "ciudad ambiental"25. Es por ello que a continuación se aborda brevemente la historia de este emprendimiento y los discursos que lo legitiman como ciudad ambiental.

La planificación urbana privada: el caso de Nordelta. ¿Ciudad ambiental?

Nordelta es la mayor de las "ciudades privadas" en Argentina. Con una superficie total de 1.600 ha. está integrada por 20 barrios cerrados, con capacidad proyectada de 140.000 habitantes en 20 años, servicios de ciudades intermedias como centros de compra (shopping center y supermercado), sanatorios privados, centros de educación que incluyen desde el jardín de infantes hasta nivel universitario, accesibilidad brindada por nuevas o modernizadas autopistas y rutas, canales de navegación con acceso al río Lujan, dos futuras estaciones ferroviarias, entre otros.

Nordelta comenzó como proyecto en 1972, cuando las empresas Supercemento SAIC.-DYOPSA adquirieron a muy bajo costo parte importante de las tierras pertenecientes al valle de inundación del río Lujan, entre las localidades de General Pacheco y Benavídez en el municipio de Tigre.

Se anticiparon a lo que sucedería dos décadas después luego de la reforma del Estado y el nuevo papel estatal en la producción urbana. Tal como sostiene el presidente de las empresas antes aludidas, el proyecto Nordelta resignificó la producción del espacio urbano, puesto que hasta ese momento el único que podía producir grandes fragmentos urbanos era el Estado

La propuesta del plan director de Nordelta se efectuó bajo la impronta de las nociones de "sustentabilidad ambiental" divulgadas desde las últimas décadas del siglo XX. Los planes directores juegan un papel protagónico en la legitimación de las UC como productos de "alta calidad ambiental".

Los desarrolladores e inversores sostienen que con el cumplimiento del plan director diseñado para la mega-UC se evitarán los problemas tradicionales de los centros urbanos: inseguridad, contaminación ambiental, paisajes deteriorados, etc. Expresiones como estas marcan la importancia que está alcanzando la planificación urbana privada a partir del desarrollo de las mega-UC en Argentina durante los años noventa, "superadora" supuestamente de los errores cometidos por parte de la planificación estatal en décadas anteriores. No deja de resultar paradójico que, sobre la base del debilitamiento de la planificación estatal, se haya fortalecido una rígida planificación privada, no ya con sentido público, sino para el aprovechamiento privado

Algunas consideraciones finales

Actualmente, cerca del 25 por ciento de la superficie del AGBA pertenece a áreas inundables: las cuencas de los ríos Matanza-Riachuelo, Reconquista, Lujan y los bajos ribereños del Río de la Plata.

Como puede observarse, la planificación urbana está siendo apropiada por los actores económicos privados productores de UC (sobre todo para el caso de las mega-UC), no ya como un intento de orientación pública y búsqueda de objetivos generales, sino como manera de producir territorios que satisfagan necesidades privadas.

Las planificadas mega-UC se colocan como "nuevos productos verdes" dentro del mercado de consumo residencial, siendo los planes directores y los planes de manejo ambiental "nuevas etiquetas verdes" que certificarían la calidad de esos productos, medidos a través de indicadores ambientales, tales como: proporción de espacios verdes "públicos" sobre los destinados a viviendas y servicios, tipo de árboles, de céspedes en las canchas de golf, de peces implantados en los lagos.

En oposición a lo que sostiene el discurso de la "sustentabilidad ambiental", la expansión de las UC sobre rellenos en áreas inundables involucra impactos negativos de importantes magnitudes. Concretamente, esa "naturaleza" vendida en fragmentos, en pedazos, por estos emprendimientos inmobiliarios, ha sido transformada, alterando tanto su forma como sus funciones. Al simular los rellenos espacios no inundables, se niegan las cualidades físico-naturales propias que estos ecosistemas tienen.

Los impactos negativos generados son evidencia de cómo los costos y los beneficios ambientales son desigualmente distribuidos en términos sociales. El análisis presentado pone de relieve cómo la lógica de la producción del espacio continúa efectuándose a expensas del deterioro socio-ambiental de los sectores con menor poder: los habitantes más antiguos pertenecientes a los sectores medios y bajos de esas áreas de Tigre.

La necesidad de divulgar a las UC como "espacios verdes", de "vida saludable", lejos del contaminado centro metropolitano, enmascara la obtención de grandes lucros. En realidad, se comercializan tierras destinadas a la producción agrícola (de baja calidad) que luego son vendidas como tierras urbanas. Asimismo, la valorización de las cualidades "naturales" únicas de esos espacios (como las características del paisaje del Delta o de la costa de Río de la Plata), en un contexto de creciente sensibilidad ecológica, permite la obtención de lucros que se obtienen de una renta monopólica. Se suman de esta forma esos dos procesos para hacer a esas operaciones inmobiliarias altamente rentables.

Se opera una despolitización de las consecuencias que traen aparejadas esos enormes negocios urbanos, rechazando la existencia de conflictos sociales que tienen como base al ambiente, la economía y la producción del espacio. En suma, el discurso de "lo sustentable" disimula los problemas del espacio cada vez más desigual y de su producción.

Detrás de esa despolitización parece encontrarse una política urbana local particular. Es el gobierno municipal quien genera las condiciones para que esas grandes inversiones urbanas puedan realizarse: cambios en la regulación, gestiones o articulación de diferentes actores públicos y privados y oferta de financiamiento. Se observa, en consecuencia, una asociación entre las autoridades locales y los desarrolladores de las UC que se basa, por una parte, en la realización de los negocios urbanos y, por la otra, en la búsqueda de un modelo de municipio de clases medias. El gobierno municipal contribuye a legitimar la producción de UC garantizando condiciones de calidad asociadas con la exclusividad del producto. Esa asociación, que parece acercarse a lo que se ha llamado la "máquina del desarrollo urbano" (Molotch, 1976), tiene como resultado más inmediato la orientación de la producción inmobiliaria hacia los sectores medios y medios altos, sin atender las necesidades de vivienda e infraestructura de la población de ingresos medio-bajos y bajos del municipio. En definitiva, parece que se busca una redefinición socioeconómica del municipio, más homogéneamente basada en los sectores medios, más allá de los costos ambientales y sociales que acarrea. Todo ello en un proceso que aparece caracterizado por la articulación entre el discurso ambiental y la cooperación público-privada.

http://www.scielo.cl/scielo.php?pid=S0250-71612008000100005&script=sci_arttext

18 de octubre de 2010

El Cardales que quiero

(Nota publicada en La Semana Ya de Los Cardales )

Conozco Los Cardales desde la panza de mi madre (hace 44 años); mis padres vinieron a visitar a unos familiares en 1960 y nunca más perdieron contacto con el lugar. A partir de ese momento, comenzaron a recorrer la zona, averiguaron y terminaron comprando media hectárea frente a donde hoy se encuentra la Escuela 19.

Nuestros fines de semana y vacaciones transcurrían aquí, salíamos de nuestra casa el sábado a la mañana, mi papá optaba por los «pozos» de la ruta 4 (en realidad, la banquina, ya que era por donde mejor se podía transitar), antes que el «desértico» ramal a Pilar.

Antes de llegar al «terreno», en el cual fuimos edificando poco a poco, austeramente, hacíamos el recorrido correspondiente: carnicería del «Negro Gigena», la compra de la galleta de campo en la panadería de Zec, los muñequitos de «los Gualchi»… Las «perezosas» de Amílcar Mileo fueron una de las primeras adquisiciones. Por último, quedaba la compra de la barra de hielo en lo de Fito, ya que no teníamos luz en los primeros tiempos. Sin luz… gracias a esa falta, a la noche, cuando nos acostábamos, jugábamos en familia a adivinar qué sombras hacíamos con nuestras manos en la pared.

Cada tanto, mi papá conseguía una cabra «para que cortara el pasto», o alquilábamos caballos, o íbamos en tren a Capilla del Señor, o tomábamos helados Massera en lo de Di Yorio; después íbamos a la plaza. ¡Los golpes que recuerdo haberme dado en esta misma calesita! Por suerte para mis hijos, ahora a los «subeybaja» les pusieron manijas.

Fuimos creciendo y a veces nos aburría venir el finde para acá, otras veces veníamos con amigos en malón. Y la ruta 4 seguía siendo la misma, ya teníamos luz, a Fito no lo visitamos más; si algo necesitábamos lo conseguíamos en «Grandes Tiendas Mansur», en el corralón de Allegri, o en lo de Ponce de León… El Rotary hizo el arco de entrada desde la ruta 6.

Vine con amigos o con algún novio en tren, y caminábamos sin ningún tipo de riesgo las «cuatro cuadras de campo» (como decía mi padre) hasta la casa, desde la estación. Recuerdo cuando adolescente, el pobre viejo me trajo con seis amigas a pasar el día, cantaba con nosotras, bailaba, y nos divertíamos. Volvíamos cansadísimas a casa, con ese olor a campo que aún siento.

Los tiempos cambiaron, surgió el Country y otros barrios, pero Cardales sostenía su esencia, todavía podíamos contar con las pastas de lo de Trovatelli. ¿ Alguien recuerda a Tío Popo?

Y sí, todo cambia…el viejo decía siempre que cuando se jubilara se venían con mamá a vivir acá. No fue así, nunca llegó a cumplirlo, no pudo, se fue antes de tiempo. Y Cardales quedó medio en el olvido, con los duelos, casamientos y el trabajo lo dejamos un poco al margen ; pero de nuestras cabezas, no de mi corazón.

El terreno se vendió con mucho dolor y desacuerdo de mi parte. Pero como he aprendido con el tiempo «las cosas pasan por y para algo». Casada y con nuestra primera hija, Cardales seguía flotando en nosotros y empezamos a «rumbear» otra vez para estos pagos; primero reconociendo zonas, llorando recuerdos y seres queridos que ya no están. Y después, con proyectos de conseguir un terrenito para fin de semana. Lo conseguimos. Pero ya siendo cuatro integrantes en la familia, la vuelta de los fines de semana y los costos no nos cerraban, y proyectamos construir para mudarnos. Y lo hicimos, después de vivir toda la vida en la Zona Norte del Gran Buenos Aires, y en plena crisis del 2001 resignamos comodidades por calidad de vida.

Me reencontré con este lugar donde aún escucho ese mágico sonido del viento entre las casuarinas, el canto de las torcazas, las ranas pidiendo agua. Todavía desde el living de mi casa puedo celebrar si llueve o si el sol raja la tierra, porque cualquiera de los dos paisajes es una postal.

Y Cardales sigue creciendo, pero igualmente todavía puedo sentir que acá soy alguien, no por lo que tengo, sino por quién soy. Y luchamos para sostener en mis hijos los valores en todos los actos, en cada día; en la generosidad hacia nuestros semejantes, los animales, nuestra tierra. Ellos no habrán conocido el pueblo que conocí yo, no lo pretendo, eso sería chatura, dejadez; pero tanto los míos como tus hijos, o nietos, sobrinos, etc., como nosotros los adultos, necesitamos sostener la esencia de Cardales, donde aún no se necesitan semáforos, sólo en casos extremos y desubicados se escuchan bocinazos, donde no me puedo olvidar de nada cuando volvemos para casa, porque sino a la hora de la siesta está todo cerrado. Y a veces me quejo y me quejo, por las distancias, por la leña, por el barro y los cortes de luz en el verano.

La verdad, me tengo que sincerar: me gusta esto, lo necesito, lo vine a buscar, por algo seguimos acá desde hace nueve años. Y a nuestros hijos, si bien crecieron en este lugar, todavía les sorprenden las lechuzas, las liebres, intentan pasar sigilosamente cerca de los cuises para poder verlos más de cerca. Aún no se animan a tocar a los sapos, gritan por las culebras, pero le prohíben a su padre que las mate, se impresionan por el lagarto overo. Nos están reeducando a nosotros para mirar a nuestro planeta con más respeto.

Soy consciente de que el crecimiento es necesario, no podemos quedar afuera del mismo, pero no es crecimiento sino se preservan las raíces del lugar, sus habitantes, sus costumbres, sus idiosincrasias. Eso es invasión, es atropello, es desgarro.

Sincerémonos con nosotros mismos, bajémonos del tren de la vorágine, del consumismo, del facilismo, del «todo ya», y pensemos qué buscábamos cuando llegamos a Los Cardales. Yo me sincero y empiezo por mí: vine a buscar paz, y concentrándome en este lugar llegué a darme cuenta de que encontré mi paz interior.

No caigamos en el conformismo de pensar que no podemos hacer nada desde nuestro lugar, que ya está todo hecho, o todo perdido. Nunca, nunca es tarde para redescubrir quiénes somos realmente, quiénes queremos ser por sentimiento y no por mandato.

La palabra MEGA es «grande»; en conjunto, es impersonal, arrasa, anula, nos perdemos como individuos y caemos en el individualismo. Una megaurbanización arrasa con la identidad de un pueblo, y esto incluye a los seres humanos, animales, plantas, en definitiva, al medio ambiente. Anula a la naturaleza, y ella es sabia: no divide por estratos sociales, económicos, culturales, se brinda a todos por igual.

Saquémonos las caretas, no miremos para otro lado, en este barco estamos todos, y si se hunde nos arrastra a todos, sin distinción de nada. Sabemos que cada espacio geográfico cumple una función en nuestra tierra: los animales, las plantas, los humedales… Comencemos de una buena vez a utilizar nuestra libertad como corresponde, ser libres no nos hace mejores, nos hace más responsables; sólo es libre aquel que sabe usar bien sus límites. Si tanto amamos a quienes nos sucederán , tengámoslo en cuenta. Comencemos de una buena vez a utilizar nuestra libertad como corresponde, ser libres no nos hace mejores, nos hace más responsables; sólo es libre aquel que sabe usar bien los límites.

«La tierra no es la que heredamos de nuestros padres, sino la que les dejamos a nuestros hijos» .

http://lasemanaya.com/el-cardales-que-quiero/

12 de octubre de 2010

Megaurbanización: ¿Progreso para Cardales?

(Nota publicada en "La Semana" de Los Cardales)

¿Alguna vez te preguntaste qué significa la palabra «progreso»?

Busqué en el diccionario el significado y dice: «(Del lat. progressus). Acción de ir hacia adelante. Avance, adelanto, perfeccionamien-to».

Al hurgar un poco más en el significado amplio de la palabra, me encontré que se define como: «El concepto que indica la existencia de un sentido de mejora en la condición humana».

Como ves, es una palabra que implica un conjunto de cosas que nos mejoran a cada uno de nosotros día a día.

Por eso hoy quiero preguntarte a vos, vecino de Cardales o de alguno de los barrios del corredor de Río Luján, ¿sabés lo que va a significar la instalación de una megaurbani-zación muy cerca de donde vivís?

Seguramente no tiene nada que ver con el progreso. O acaso progresar es empeorar nuestra calidad de vida, principalmente motivada por la contaminación de nuestras napas, o tal vez la posibilidad de vivir con las aguas del río Luján entrando en nuestras casas. ¿Esto es progreso para vos?

Escuchaste posiblemente voces a favor de esta «ciudadela», motivadas en un supuesto crecimiento económico, desarrollo de Cardales, «vamos a vender más», dicen algunos. ¿Vos lo crees así? ¿Pensás realmente que alguien que busca un lugar rodeado de alambres y paredones para vivir, separado de todos nosotros, puede ir a comprar a nuestro pueblo? Alguien que busca vivir en lugares exclusivos, ¿puede ir como vos a comprar facturas a la panadería cercana a tu casa?

Yo puedo empezar a responderte. Toda megaurbanización requiere de MEGA servicios, de MEGA Supermercados, de MEGA Panaderías, todo es MEGA, todo es a lo grande. ¡Imaginate 40.000 personas! Dicen que nosotros seremos apenas 10.000 en el censo de este año, para toda nuestra localidad en conjunto.

Nada de lo que nos rodea es tan grande, acá todo es más familiar, pequeño, de pueblo… de este pintoresco y hermoso pueblo de Cardales. Lugar que vos elegiste, porque era y es todavía hoy así.

Te vuelvo a preguntar. ¿Cuál es entonces el verdadero beneficio? Seguramente para unos pocos lo habrá, pero es siempre para los mismos, esos que vos y yo conocemos, de los que nos quejamos permanen-temente. Esos siempre están. Incluso vienen nuevos, frotándose las manos y contando billetes de antemano. Quieren hacer dinero, ¿y a costa de qué?

Es obvio decirlo, pero a costa de nuestros HUMEDALES, ese lugar tan preciado que está en constante interrelación con los seres vivos que lo habitan: Vos, yo, tu mujer, tu marido, tus hijos y nietos, tus amigos, tu papá, tu mamá, tu perro, tus plantas, tus pájaros, tus árboles, etc.

Pero también a costa de tu tranquilidad y de la mía, de tu «seguridad» y la de tu familia, del aire sano que respirás, del agua que tomás, del silencio con el que convivís, del placer de ver que lo que te rodea no está contaminado por los padeceres de las grandes ciudades. ¿Vos querés que nos arruinen todo esto? ¡Yo no quiero!

Esto es lo que está en juego. ¿Vos lo vas a permitir? ¿Vas a dejar que decidan sacrificar tu paz, por ir al shopping?

Siempre criticamos a nuestros políticos y funcionarios por su corta visión, por su falta de políticas a largo plazo, por su no control, por no cuidar y proteger nuestro ambiente, todo ello seguramente es cierto. Pero ahora sos vos el que tiene la palabra y puede decidir con su opinión cómo querés vivir a largo plazo.

Hoy un gran grupo de vecinos mancomunados en esta causa te pedimos que grites bien fuerte, que el único progreso que querés, es el que te respete a vos y a mí, al vecino tuyo y al mío, a todos los que buscamos darle a nuestros hijos, a nuestros nietos y a los hijos futuros un lugar mejor y más sano donde habitar. Debemos hacer de Los Cardales, un lugar que progrese día a día, pero siempre primero pensando en el bienestar de sus habitantes en armonía con su entorno natural.

http://lasemanaya.com/megaurbanizacion-%c2%bfprogreso-para-cardales/

11 de octubre de 2010

El Megaemprendimiento a fuego lento

Nota publicada por Play Cardales

Aunque aún no se conozca su nombre, el proyecto –master plan– impacta. Más de una decena de “barrios” con diferentes características y target, intercomunicados por caminos –algunos públicos– y una avenida central que comunicará a los distritos vecinos. Lagos artificiales, áreas de servicios con centros comerciales, colegios, centro médico, estación de servicio y todo lo necesario para autoabastecer a cerca de 40 mil nuevos vecinos que buscarán experimentar una nueva manera de vivir, en contacto con la naturaleza… y seguros. Argumentos de folleto de todo barrio privado que quiera tener éxito en la venta de parcelas.
También facilitarán las cosas para los que trabajen dentro del “mega”, durante la construcción y como prestadores de servicios con posterioridad. Para el caso se proyectó una estación de ferrocarril (sobre la línea Mitre entre Zelaya-Los Cardales) que se llamaría “Estación Campana”. Además nuevos accesos con lo que el proyecto considera una comunicación vital y estratégica en la etapa de construcción: Los Cardales. Habrá rutas de conexión, una de ellas correrá en ambos lados del ramal ferroviario.
Ni bien los vecinos tomaron algún conocimiento del “mega” por una publicación del periódico local “La Semana”, empezaron a conocerse opiniones a favor y en contra.
Para el municipio de Campana no es una tarea fácil analizar y llevar adelante los trámites de semejante complejo (reconocido por los propios funcionarios), por lo que por obligación y oportunidad giraron el grueso del expediente a la Provincia. Lo que aseguraron en el Municipio –a lo que a ellos respecta– es que el proyecto se estudiará muy bien. En ese sentido podría haber modificaciones, como los metros que separarán la margen del rio Luján del barrio en sí: de 35 metros que marca la ley a 100 metros que considerarían más pertinente.
El proyecto urbanístico, recreativo y comercial de 1011 hectáreas que se proyecta sobre los bajos del Luján demorará en su aprobación bastante más de lo que se preveía en un primer momento, ya que por sus características particulares el proyecto requiere de la modificación de normativas legales de orden municipal y provincial que llevarán su tiempo de desarrollo, discusión y aprobación.
Esto no significa que el proyecto esté trabado, por el contrario, recibió el beneplácito del poder político municipal de Campana. Sucederá que deberá recorrer gestiones y trámites bastante más complejos que cualquier otro barrio de los tantos que ya asoman sobre la Ruta 4. Un dato en este sentido: el municipio de Campana giró a la provincia la responsabilidad de aprobar varios aspectos del proyecto, algunos porque es responsabilidad pura de las autoridades provinciales, otros por la magnitud de las obras y su complejidad. El estudio de Impacto Ambiental es uno de este último caso. Las obras hidráulicas y usos del río Luján están en el primer caso.
Lo que tiene de particular este emprendimiento, además de su tamaño descomunal, es que está proyectado sobre los bajos de inundación del Rio Luján, en una zona actualmente tipificada en el catastro municipal como zona de reserva rural. Para poder avanzar con el proyecto debe cambiarse la zonificación. Ese trámite requiere la sanción de una ordenanza por parte del Concejo Deliberante de Campana y su posterior convalidación por el gobierno provincial.
También la parte de ingreso por la Ruta 4 que tendrá fines comerciales que, por ahora, están prohibidos, por lo que deberá cambiarse allí también la zonificación.
El contexto del “Mega” y los cambios de zonificación se da en el marco de un debate sobre un nuevo plan estratégico de Campana que incluye ciertas propuestas de cambios en el uso del suelo. Las más profundas serán en el corredor Rio Luján-Los Cardales.
Logrado esto el proyecto iniciará el trámite ordinario para la obtención del certificado de
prefactibilidad primero y de factibilidad luego. Para todo el proceso no se prevé un tiempo menor a 3 o 4 años, según el cálculo de los conocedores de estos menesteres. Es decir que difícilmente se vea el movimiento de una máquina o cualquier signo de concreción del proyecto antes de ese plazo.
Otro punto difícil de dilucidar será todo lo atinente a la conservación ambiental, ya que una parte el proyecto está asentada sobre los humedales pertenecientes al valle de inundación del Rio Luján. “Esa zona funciona como una gran esponja que permite mitigar los efectos de las periódicas inundaciones del río, y a la vez configura un ambiente particular, con sus especies naturales específicas”, explican desde los sectores ambientalistas.Entre posturas equilibradas, ya se inició el debate entre quienes favorecen el desarrollo económico a cualquier precio y a los conservacionistas a ultranza que no aceptarán cambios en el paisaje. Dependerá de la racionalidad de todos los actores encontrar el punto medio que permita un desarrollo sustentable de la región, protegiendo los ambientes autóctonos, y a la vez haciéndolos accesibles al disfrute y valoración de toda la comunidad.
El debate posible
La discusión por la nueva ordenanza de zonificación se dará en momentos en que la Municipalidad de Campana se encuentra en plena reelaboración y discusión pública del código de planeamiento urbano en su capítulo destinado al eje urbanístico de la Ruta 4.
Como ya se hizo en la anterior modificación de esa normativa (en el año 2003) la comuna invitará a participar de la discusión a todos los actores involucrados en el tema. Sociedades de fomento, comisiones de vecinos, entidades de bien público, instituciones públicas y privadas, ambientalistas, emprendedores y vecinos particulares podrán participar del debate y podrán dejar sentado su punto de vista sobre la normativa en general y sobre este proyecto en particular.
Cuando el proceso de aprobación del proyecto vaya avanzando habrá otra instancia de participación comunitaria cuando se realice la audiencia pública a que obliga la ley.
Serán esos espacios institucionales los ámbitos adecuados con que contarán para hacer oír su opinión todos aquellos que ya han planteado reservas al proyecto (ver aparte). Será allí donde podremos todos los interesados aportar a construir la normativa que regulará el crecimiento del eje urbanístico de la ruta 4 por los próximos 10 años.

En ese espacio de discusión será donde se pondrán los límites al desarrollo, se delinearán los criterios a seguir para lograr el gran objetivo: permitir el crecimiento y el desarrollo urbanístico y económico de la zona, pero de forma ordenada, ambientalmente responsable, y sin perder las características valiosas que ese corredor hoy tiene, y que tanto seducen a lugareños, visitantes y sobre todo a emprendedores.
A favor y en contra
La información hecha pública hace pocos meses, se convirtió en un globo de ensayo y sirvió para comenzar a evaluar el impacto público que la noticia generaría. No fue muy clara ni concreta, pero alcanzó para que organizaciones y particulares que tenga algo que decir sobre un proyecto de esa envergadura exponga su posición al respecto.
Las voces disidentes o esperanzadas no tardaron en hacerse oír, recorriendo todas las paradas del largo espinel. Como muestra, van textualmente algunos comentarios dejados por lectores del periódico La Semana en la nota de referencia (y que se pueden consultar completos en www.lasemanaya.com, en su buscador: La nueva ciudad que cambiara a los cardales)
En contra
“Estamos viendo los últimos días del pueblo de Los Cardales que con esto definitivamente quedará incorporado al Conurbano.”
“Ya no es lo que era la tranquilidad de esta zona, ahora son solo emprendimientos inmobiliarios para que ganen plata unos pocos.”
“!!Chau tranquilidad!! En breve padeceremos el mismo drama habitacional y de seguridad que Pilar.”
“Lo que es malo para la naturaleza, es malo para el hombre. Se perderá flora y fauna, se inundarán miles de vecinos aguas arriba, ya que el agua no podrá circular como lo hace hoy, y estamos poniendo en riesgo el agua potable para los que nos seguirán.”
A favor
“Mientras el crecimiento sea ordenado y haga que todo Cardales crezca y que toda la zona se valorice y haya más trabajo para todos, por mi es bienvenido.”
“Lo que tienen que hacer nuestras autoridades es no dejarse arrollar por el avance de los nuevos emprendimientos y proteger la fisonomía y calidad de vida de este lindo pueblo.”
“El crecimiento urbano no se puede parar, eso es irreversible, sucede en todos los centros urbanos. El tema es como se crece. Si se crece solo con emprendimientos privados que fragmentan el espacio público y por ende las relaciones sociales, quebrantando lo que me parece uno de los grandes privilegios de Cardales que se relaciona con ese estilo de vida de pueblo; o se crece con mas ciudad, entendida como promoción del espacio público lugar donde se mezcla el que vive en el pueblo con el de Las Lomadas u otros barrios.”
Fuente: Play Cardales.

Los vecinos quieren saber

(nota publicada en el diario La Semana de Los Cardales)

Un grupo de habitantes de los barrios que integran el corredor de la Ruta 4 le pidió al Ejecutivo campanense información sobre el mega emprendimiento privado que la empresa «E2 S.A»proyecta construir en Río Luján. Los vecinos quieren saber si el barrio de gran escala puede afectar el medio ambiente.


Una carta firmada por un grupo de vecinos de Los Cardales y los barrios Monteverde, Santa Brígida, Las Lomadas, Alto Los Cardales y Cardales Village llegó el lunes al despacho de la Intendenta de Campana Stella Giroldi solicitando información referida al mega emprendimiento inmobiliario que la empresa «E2 S.A» proyecta construir en

la cuenca de inundación del río Luján.

A tres meses de que este medio difundiera los detalles sobre la instalación de un barrio privado de gran escala de unas 1.000 hectáreas en los campos que bordean a los barrios de la Ruta 4, entre la Ruta 9, Los Cardales y el río Luján, los vecinos solicitaron a la jefa comunal un reporte minucioso respecto a las características del citado barrio y su impacto en el medio ambiente.

La nota presentada en el Municipio consta de nueve puntos específicos. En primera instancia los vecinos quieren saber si ya hubo una presentación formal del proyecto en el Palacio Municipal y, si la hubo, en qué consiste, su ubicación, dimensión y características principales.

Respecto a las consecuencias

ecológicas, los vecinos le consultaron a la Intendenta si se presentó el estudio de impacto ambiental obligatorio antes de la aprobación de la obra, si la empresa desarrolladora solicitó la emisión de un certificado de aptitud ambiental y si el proyecto del barrio fue enviado a la Secretaría de Planeamiento, Obras y Servicios Públicos para que esta cartera emitiera su dictamen.

También preguntaron si se entregó un plan hidráulico para preservar los humedales; en caso de haber sido presentado, pedirán información sobre las consecuencias de la instalación del megaemprendimiento en los barrios circundantes (niveles del agua y la posible contaminación de las napas).

Los vecinos tampoco ocultaron su preocupación por la distribución eléctrica a partir de la llegada de la nueva ciudadela a Río Luján. En este sentido preguntaron a las autoridades municipales de Campana si la empresa EDEN planea la elaboración de un proyecto para evitar problemas de tensión eléctrica en la zona.

Otro de los interrogantes pasó por la zonificación de ese sector de Campana. En la nota incluyeron dos preguntas a este respecto: ¿Qué tipo de zonificación corresponde a esa región del Distrito? ¿Y si se está tratando algún proyecto para modificar la citada zonificación?

Por último, le solicitaron a la Intendenta un informe detallado de las acciones que la Municipalidad de Campana está llevando a cabo para preservar la sustentabilidad del humedal, considerando que el emprendimiento «afectará la zona de humedales, que contiene algunos de los ecosistemas más productivos que existen en el país. Lejos de ser tierras improductivas, cumplen funciones ecológicas de gran beneficio para el ser humano».

Aner pidió información

El concejal de FE Andrés Aner presentó en la sesión ordinaria del pasado lunes del Concejo Deliberante de Exaltación de la Cruz un pedido de informes sobre la megaurbanización. En el escrito incluyó una serie de preguntas para saber si el Municipio tiene conocimiento del desarrollo privado, si la comuna de Campana le presentó los detalles del proyecto, teniendo en cuenta que representará un «alto impacto ambiental» para nuestro Distrito y cuál es la posición adoptada por el Gobierno Municipal exaltacrucense.

http://lasemanaya.com/los-vecinos-quieren-saber/

4 de octubre de 2010

LOS VECINOS QUEREMOS SABER !!!!!!

UN GRUPO DE VECINOS DE LOS CARDALES, BARRIO MONTEVERDE, BARRIO SANTA BRIGIDA, BARRIO LAS LOMADAS, BARRIO ALTO LOS CARDALES Y CARDALES VILLAGE, HEMOS PRESENTADO UNA NOTA ANTE LA SRA. INTENDENTA DE CAMPANA PARA QUE NOS INFORME DETALLADAMENTE ACERCA DEL MEGAEMPRENDIMIENTO A INSTALARSE EN LA ZONA DEL CORREDOR RIO LUJAN-LOS CARDALES.

EL TEXTO DE LA MISMA LO EXPONEMOS A CONTINUACION:

                                                    
SOLICITA SE PROVEA INFORMACIÓN


Señora Intendente de la
Municipalidad de Campana
Stella Maris Giroldi
S______/______D

                                                           

“ DATOS DE LOS VECINOS SOLICITANTES “; en nuestro carácter de habitantes de Los Cardales y Corredor Rio Lujàn, y constituyendo domicilio para presentes fines en la calle ……………, ante la Sra. Intendente respetuosamente nos presentamos y decimos:

                       
                                    I – OBJETO

Que de conformidad con lo establecido por las Leyes Nacionales N° 25.831 y 25.675, así como las Leyes Provinciales N° 11.723, con su Decreto 2579/04  y los artículos 13° de la Convención Americana sobre Derechos Humanos, 19° de la Declaración Universal de los Derechos Humanos y 19.2 del  Pacto  Internacional de Derechos Civiles y Políticos (todos incorporados con jerarquía constitucional, por la reforma de la Carta Magna Nacional operada en el año 1994),  venimos a solicitar que el organismo a vuestro cargo nos informe con relación a las actividades que la empresa “E2 SA” llevará a cabo en la zona del Río Luján, Los Cardales.
                                    

                                    II – MARCO FACTICO Y JURIDICO

La empresa «E2 S.A.» empezará a construir un barrio privado de gran escala de unas 1.000 hectáreas en Río Luján que albergará alrededor de 40.000 personas en los más de 5.000 lotes que saldrán a la venta.
La cuenca del río Luján está ubicada en el NE de la provincia de Buenos Aires y abarca unos 3000 km2. El cauce principal recorre aproximadamente 130 km en sentido SO-NE desde su nacimiento en el partido de Suipacha ­como arroyo Los Leones- hasta su encuentro con el delta del Paraná, en donde tuerce su curso en dirección NO-SE hasta la desembocadura en el río de La Plata. Atraviesa los partidos de Mercedes; Luján; Pilar; Exaltación de la Cruz; Campana; Escobar; y Tigre, y a lo largo del primer tramo mencionado, recibe tributarios también desde los territorios de San Andrés de Giles y General Rodríguez.
En consecuencia dicho emprendimiento afectará la zona de humedales, que contienen algunos de los ecosistemas más productivos que existen en el país. Lejos de ser tierras improductivas, cumplen funciones ecológicas de gran beneficio para el ser humano.

            En cuanto al marco legal, el Art. 1° de la Ley 25.831 garantiza el “…derecho de acceso a la información ambiental que se encontrare en poder del Estado, tanto en el ámbito nacional como provincial, municipal y de la Ciudad de Buenos Aires, como así también de entes autárquicos y empresas prestadoras de servicios públicos, sean públicas, privadas o mixtas”. Asimismo, en cuanto a qué considera por información ambiental, esta ley establece en su Art. 2° “…toda aquella información en cualquier forma de expresión o soporte relacionada con el ambiente, los recursos naturales o culturales y el desarrollo sustentable. En particular: a) El estado del ambiente o alguno de sus componentes naturales o culturales, incluidas sus interacciones recíprocas, así como las actividades y obras que los afecten o puedan afectarlos significativamente; b) Las políticas, planes, programas y acciones referidas a la gestión del ambiente”.

Por último, en cuanto a la legitimación para ejercer el derecho, la mencionada ley dispone que el mismo “…será libre y gratuito para toda persona física o jurídica, a excepción de aquellos gastos vinculados con los recursos utilizados para la entrega de la información solicitada...” y agrega que para acceder a la misma “…no será necesario acreditar razones ni interés determinado. La amplia legitimación se ve complementada, en pos de un mayor acceso, con el principio de Informalidad, cuyo único requisito es que la realización del mismo sea formulada por escrito y con la identificación del requirente (Art. 3º).

            Se suma a ello la Ley Nacional Nº 25.675 (denominada Ley General del Ambiente), que consagra el derecho de “todo habitante” de obtener de las autoridades la información ambiental que administren y que no se encuentre contemplada legalmente como reservada (artículo 16). Cabe observar que, al igual que la Ley Nº 25831 antes mencionada, esta normativa rige en todo el territorio nacional, siendo ésta de orden público y correspondiendo su aplicación a los tribunales ordinarios (artículos 3 y 7).

                                   Del mismo modo, en materia provincial nos ampara el art 28 de la Constitución de la provincia de Buenos Aires, la ley N° 11.723 de Protección de los Recursos Naturales de la Provincia de Buenos Aires.

            Por último, cabe agregar el interés público del caso, que radica en lo dispuesto por el artículo 41 de la Constitución Nacional, que expresamente consagra la protección del medio ambiente (y la obligación, por parte del Estado de proveer información ambiental y, por parte de los particulares, de proteger el ambiente), y los pactos incorporados artículo 75 inciso 22 a nuestra Carta Magna.
           
                                   Por todo lo expuesto, de conformidad con la legislación en vigencia, de la cual extrajimos una breve reseña, que resulta sumamente esclarecedora de la situación es que le solicitamos a la Sra. Intendente, nos informe sobre las preguntas que “infra” se le formularán.

                                  
III – INFORMACIÓN SOLICITADA

Por lo expuesto a la Señora Intendente, solicitamos que respecto de la problemática detallada ut supra nos informe:


1-      Si se ha presentado el proyecto de emprendimiento correspondiente y de ser así en qué consiste. En este sentido, se nos permita extraer copia del mismo.

2-      Si se ha presentado el correspondiente estudio de impacto ambiental, previo a toda ejecución y aprobación de obra.

3-       Se informe si la empresa interviniente antes mencionada ha solicitado la emisión de un certificado de aptitud ambiental.

4-       Se informe si el emprendimiento aludido ut supra y sus proyectos se han enviado a la Secretaría de Planeamiento, Obras y Servicios Públicos, a su cargo, para que emita su dictamen.

5-      Si se ha presentado el plan hidráulico solicitado, en qué consiste y como se verán afectados los barrios circundantes, en cuanto a los niveles de agua y posible contaminación de las napas.

6-      Si existe actualmente un proyecto en cuanto a la distribución eléctrica por parte de la empresa EDEN, teniendo en cuenta la baja tensión eléctrica  de la zona y el mayor consumo que implicaría el mega emprendimiento

7-      Qué tipo de zonificación actualmente corresponde a esta zona, cuál es el decreto de zonificación aplicable y su fecha de publicación en el Boletín Oficial.

8-      Informe si existe a la fecha algún proyecto para modificar la zonificación del lugar mencionado.

9-      Si existen en la actualidad acciones llevadas a cabo por la Municipalidad de Campana, a su cargo, con el objeto de preservar la sustentabilidad del humedal en general. De ser ello así, se brinde una breve reseña de ellas.

                          
                           Para todos los casos, se indique fuente y última fecha de actualización de la cual se han obtenido los datos que se suministran.


                                IV- DERECHO

La presente solicitud se funda en el derecho constitucional establecido en el art. 41 de nuestra Constitución Nacional como asimismo el derecho establecido en la Ley Nacional N° 25.831 sobre el Régimen de Libre Acceso a la Información Pública Ambiental, preceptuado en los arts.1, 2 inc.a, 3,  artículos 6, 10 y 16 de la Ley 25.675 y el Anexo I del Decreto 2549/04. Asimismo, los artículos 12.4 y 28 de la Constitución Provincial y la Ley 11.723. Del mismo modo desde la reforma de la carta magna del año 1994, surge la incorporación a nuestro derecho del art. 19 de la Declaración Universal de Derechos Humanos, el art 13 de la Convención Americana sobre Derechos Humanos y el art 19.2 del Pacto Internacional de Derechos Civiles y Políticos).
                              
       
V- FORMULA RESERVA

De acuerdo a lo preceptuado en el art. 9 de la Ley Nacional 25.831, formula reserva de promover la pertinente acción judicial por la eventual falta de respuesta o ante una respuesta parcial a nuestro pedido.

Asimismo, de configurar la información recibida una violación a la normativa de protección del medio ambiente, formularemos desde ya reserva de recurrir ante la justicia en procura de una protección del medio ambiente.

                                      
VI – AUTORIZACIONES
                              
Quedan autorizados a diligenciar el presente y tomar vista del mismo, …………………..

VII- PETITORIO

Por lo expuesto a la Sra. Intendente solicitamos:
                                            
1-      Tenga por presentada y constituido el domicilio legal denunciado.
2-      Se tenga presente el derecho invocado.
3-      Se provea la información requerida en los plazos establecidos en la normativa invocada.

                         Sin otro particular saludamos a Ud. atte.

3 de octubre de 2010

“Humedales: manteniendo nuestro planeta con vida y saludable”

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